Carta abierta al ministro de Exteriores de España
Señor Alfonso Dastis,
El miércoles aseguró que "actualmente quiénes salen fuera lo que muestran es una iniciativa, una inquietud, una amplitud de miras, una adaptabilidad y una apertura a nuevos horizontes". Vayamos coma por coma.
La iniciativa que yo tengo al emigrar es la de aprender idiomas. Sí, porque tras tres años de preescolar, siete de primaria, cuatro de secundaria, dos de bachillerato y cuatro de carrera; mi nivel de inglés es nulo. Iniciativa: quiero ser bilingüe.
Inquietudes también tenía. Sobre todo eran preocupaciones sobre qué iba a hacer al terminar la carrera y no encontrar trabajo, si conseguiría pagar mis facturas con experiencia o si tendría que estudiar otro grado para poder seguir siendo becaria toda mi vida. No menciono el cursar un máster porque a las mafias es mejor no nombrarlas.
Habláis vosotros de amplitud de miras, adaptabilidad y apertura a nuevos horizontes cuando aplicáis políticas restrictivas, que ahogan y que nos trasladan a la época de nuestros abuelos. Me gustaría recordarle también que los que intentan llegar a nuestras fronteras buscan de igual forma todo eso que usted menciona, añadiendo que proceden de países en conflicto, países en guerra, países dictatoriales o países pobres.
También dijo que "irse fuera a vivir, a trabajar, enriquece, abre la mente, fortalece habilidades sociales". Señor ministro, yo es que traía la mente abierta desde casa, ¿sabe? Concretamente la tengo así desde que empecé a leer, a conocer gente, a informarme... No soy yo a la que le desquicia que dos hombes o dos mujeres sean pareja, no decido sobre si una mujer debe o no abortar, no me importa que en el dni de Manolo ponga María, ni tampoco me llama la atención que aquí en Londres las dependientas del súper me atiendan con el hiyab puesto o que todas mis vecinas vistan burka. Quién soy yo para imponer nada a nadie.
En cuanto a lo de "fortalecer habilidades sociales" tengo que decir que sí, el estar aquí me está ayudando mucho a conocer a gente. Gente española, porque es lo que más abunda en los trabajos como el mío.
Además aseguró que "con ello buscamos que estando fuera de España nuestros jóvenes se sientan lo más cercano a nosotros". No se preocupe, si nos hemos ido es porque nos falta la valentía de aquellos que se quedan a aguantar otros cuatro años de gobierno del PP. No os queremos cerca, no os queremos, no os necesitamos. Solo me gustaría sentirme cerca de España cuando se celebren elecciones y tenga que rogar el voto.
Para terminar, usted añadió que no habían expulsado a nadie. Y tiene razón, pero ¿sabe qué? A mis abuelxs tampoco los expulsó nadie durante la dictadura española, pero prefirieron vivir y trabajar en Alemania.
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| Fuente: http://www.modelocurriculum.net/biografias/politicos/alfonso-dastis |
El miércoles aseguró que "actualmente quiénes salen fuera lo que muestran es una iniciativa, una inquietud, una amplitud de miras, una adaptabilidad y una apertura a nuevos horizontes". Vayamos coma por coma.
La iniciativa que yo tengo al emigrar es la de aprender idiomas. Sí, porque tras tres años de preescolar, siete de primaria, cuatro de secundaria, dos de bachillerato y cuatro de carrera; mi nivel de inglés es nulo. Iniciativa: quiero ser bilingüe.
Inquietudes también tenía. Sobre todo eran preocupaciones sobre qué iba a hacer al terminar la carrera y no encontrar trabajo, si conseguiría pagar mis facturas con experiencia o si tendría que estudiar otro grado para poder seguir siendo becaria toda mi vida. No menciono el cursar un máster porque a las mafias es mejor no nombrarlas.
Habláis vosotros de amplitud de miras, adaptabilidad y apertura a nuevos horizontes cuando aplicáis políticas restrictivas, que ahogan y que nos trasladan a la época de nuestros abuelos. Me gustaría recordarle también que los que intentan llegar a nuestras fronteras buscan de igual forma todo eso que usted menciona, añadiendo que proceden de países en conflicto, países en guerra, países dictatoriales o países pobres.
También dijo que "irse fuera a vivir, a trabajar, enriquece, abre la mente, fortalece habilidades sociales". Señor ministro, yo es que traía la mente abierta desde casa, ¿sabe? Concretamente la tengo así desde que empecé a leer, a conocer gente, a informarme... No soy yo a la que le desquicia que dos hombes o dos mujeres sean pareja, no decido sobre si una mujer debe o no abortar, no me importa que en el dni de Manolo ponga María, ni tampoco me llama la atención que aquí en Londres las dependientas del súper me atiendan con el hiyab puesto o que todas mis vecinas vistan burka. Quién soy yo para imponer nada a nadie.
En cuanto a lo de "fortalecer habilidades sociales" tengo que decir que sí, el estar aquí me está ayudando mucho a conocer a gente. Gente española, porque es lo que más abunda en los trabajos como el mío.
Además aseguró que "con ello buscamos que estando fuera de España nuestros jóvenes se sientan lo más cercano a nosotros". No se preocupe, si nos hemos ido es porque nos falta la valentía de aquellos que se quedan a aguantar otros cuatro años de gobierno del PP. No os queremos cerca, no os queremos, no os necesitamos. Solo me gustaría sentirme cerca de España cuando se celebren elecciones y tenga que rogar el voto.
Para terminar, usted añadió que no habían expulsado a nadie. Y tiene razón, pero ¿sabe qué? A mis abuelxs tampoco los expulsó nadie durante la dictadura española, pero prefirieron vivir y trabajar en Alemania.
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